SILENCIO, ¡SE GRABA!

¡Hola! Qué gustazo que te pases por mi estudio de grabación. Te doy la bienvenida. 

¿Y cómo empiezo yo un blog? Vale, hagamos como en una primera cita “tinder”…

YO:
Pues me dedico a ser feliz, seh… Esa es mi profesión. Hasta el moño estaba de seguir lo estipulado en esta sociedad. “Mamá, quiero ser actriz” le dije a mi señora madre con 8 años al salir de mi primer musical, La Bella y la Bestia. Y di muchas vueltas hasta llegar a donde estoy ahora.

CITA TINDER:
Pero entonces, ¿eres actriz o locutora?

YO:
¿Crees que hay mucha diferencia? Sí, sí, son medios diferentes de expresar y transmitir pero, por mi experiencia, los dos juntos hacen un combo brutal. Así que, soy ambas. Soy todo lo que yo quiera ser.

CITA TINDER:
Buena forma de verlo. ¿Y esto es un trabajo?¿Te da para vivir?

YO:
Puff… Pues sinceramente no ha sido fácil, vaya, como todas las profesiones. Tomar la decisión de ser autónoma es un reto enorme, es apostar por ti y tu talento. La verdad es que la psicóloga y mi trabajo personal me ayudó mucho a encontrar ese amor propio y darme la oportunidad de creer en mí.
Así que sí, ahora puedo decir que sí me da para vivir, viajar, comer sano, independizarme…

CITA TINDER:
¿Pero te pagan por leer?

YO:
¡Exacto!
Mis amig@s me decían “Pero si tú ya lees en casa como una loca, ¡ahora encima te pagan por ello!”. 
Empezar en la profesión leyendo audiolibros fue bárbaro… Es una de las grabaciones más complicadas. No se le da todo el valor que tiene, ni económico, ni actoral, ni de dicción, de horas de grabación y edición de los técnicos… ¡nada! Pero no sabes la cantidad de cosas que aprendí. Iba hecha un flan el primer día que pisé un estudio de grabación. Así que sí, me pagan por leer.

CITA TINDER:
Oye, ¿tu madre es repostera? Porque un…


¡Vaaaaaaaale! ¡Hasta aquí la cita!
Creo que el siguiente post del blog será mejor una “quedada entre amigos”.

Así que amigos, espero que os haya gustado mi debut en esto de acercaros un poco a lo que me dedico y que me conozcáis algo más.

¡Espero veros en la siguiente quedada!

Un besazo,
Helena.